Anochece
Las puertas del campo. Esas puertas inexistentes que favorecen el abrazo entre el cielo y los árboles, entre la luz y las nubes, entre tu mano y mis dedos. . . #sunset
Las puertas del campo. Esas puertas inexistentes que favorecen el abrazo entre el cielo y los árboles, entre la luz y las nubes, entre tu mano y mis dedos. . . #sunset
Tengo el recuerdo, de niña, de un pequeño gorrioncillo que cayó de un nido. Era suave, inquieto, indefenso. Era como un trozo de guata abombada, sin apenas más hueso que el pico con el que intentaba defenderse, bravo él, de las garras humanas, grandes dedos que servían de cubilete protector a la pequeña cría.
La soledad es un virus que ataca directamente a las defensas, ese conjunto de situaciones que te hacen disfrutar de la vida, aun en los momentos amargos. Pero ese pequeño germen que es la soledad recuerda al agua en las zonas húmedas, que te cala hasta el tuétano sin apenas poder evitarlo. Y cuando esta situación alcanza el límite de correspondencia de niveles, evocando a Arquímedes, se desborda por los ojos y se mezcla con el humor salado que contiene.
De corazón, os deseo que viváis estas Navidades como si fueran las más importantes de vuestra vida. Con la gente que más queráis y haciendo presentes a los que ya no estén.
¡Feliz Nochebuena y Navidad!
Cinco olores de #diciembre (máEl otoño se presta a que abramos bien los ojos y contemplemos esa decadencia colorida de la naturaleza. Pero seguro que también has tenido otro impulso, como yo. Y es que hay ocasiones en los que, de forma inconsciente, te olvidas de mirar hacia fuera. Inspiras y espiras una y otra vez, concentrado en asimilar los olores que abren el libro de una nueva estación justo en ese momento en que diciembre abre camino hacia el invierno.
Hazme caso un momento. Cierra los ojos y respira…
Cerró su mano con fuerza. No quería dejarla escapar. En medio de la noche, con las estrellas mirando y sin poder casi ya contemplar el color cálido del frío otoño, respiró hondo para no perderse ni un segundo de oxígeno. Corría el aire, sonaba como cuando llueve entre las hojas y parece que alguien acecha. Pero no había nadie más que ella en aquel parque. Miró sus dedos y los dobló aún más sobre su palma. Firmemente, con la decisión de quien se juega lo más importante.
Ávila pone buena cara a las puestas de sol. Cada una de ellas es única y espectacular si el escenario es su monumental muralla.
Hace muy pocos días estuve en #Santiago de Compostela. Aunque fue por motivos de trabajo, llevé mi vara invisible, mis botas de #peregrina invisibles, mi chubasquero, invisible también, y un […]
La diferencia entre cortarte y cortante es sólo una letra. Y, sin embargo, entre una erre y una te, cambia el matiz. Pero no sólo en las palabras encontramos esas sutilezas que a veces nos superan, como si nos midiéramos con Fernando Alonso en el GP de Mónaco. Y aquí el matiz sería, simplemente, ir delante o detrás del renombrado piloto. Matices y sutilezas, he ahí la cuestión…